Hace casi 15 años atrás se comenzó un caso donde se acusaba al aun vivo Rey del Pop, por ser un pedofilo que había violado a niños en su parque temático en Neverland, pero esto se cerro ya que los padres aceptaron el dinero de Michael Jackson para no seguir adelante con el caso, lo cual aceptaron casi de inmediato.

Sin embargo, el daño estaba hecho y le costaría algunos años levantarse de esas acusaciones para intentar regresar en lo que se prometía como una de las giras de una estrella del Pop mas impresionantes que jamas se hubieran visto; pero esto jamás se realizo ya que el artista murió mientras se estaba creando dicho espectáculo.

Esto hizo que casi al instante la gente que lo acusaba de esto, dejara el tema en paz y Michael fuera recordado como un gran artista que nos dio excelente música. Pero el tiempo pasa y los niños crecieron y un buen día un “director” (si lo pusimos entre comillas) decide que quiere hablar mierda sobre este caso y sacar dinero rápido, por lo que hace un documental hablando sobre este tema.

Curiosamente es supuesto “director” debía ser objetivo y tomar todo testimonio, pero cuando los padres o amigos del cantante supieron que estaba haciendo y pidieron ser parte de este, para hablar a su favor, este hombre les dio las gracias, pero no era lo que estaba buscando para mostrar “Su verdad” (Nurkia te robaron la frase) al mundo.

Ahora la polémica a regresado y mas fuerte que nunca, ya que dos de los niños que ahora ya son adultos alegan sin prueba alguna más que su palabra, que efectivamente sufrieron abuso sexualmente y esto desato tal polemica, que sea tomado la decisión de sacar de los anaqueles el capitulo donde el artista participo con Los Simpsons.

James L. Brooks, el productor ejecutivo, menciono al The Wall Street Journal:

“Se siente claramente la única opción por hacer”

Los otros productores Matt Groening y Al Jean accedieron con el cambio, de acuerdo con Brooks.

“Éste fue un episodio atesorado”, dijo Brooks. “Hemos guardado muchos buenos recuerdos en esto, y esto ciertamente no les permite permanecer”.

Fuente: The Wall Street Journal